Queremos mucho a nuestras familias y trabajamos duro para darles la mejor vida posible, pero a veces olvidamos que, quizás, es más importante pasar tiempo con ellos que comprarles las últimas tendencias en moda o tecnología. Incluso los niños mayores, aunque no lo digan abiertamente, necesitan pasar tiempo con sus padres y hermanos. Los expertos coinciden en que las actividades conjuntas, fomentan relaciones familiares sólidas y tienen repercusiones importantes en la autoestima y la salud. 

 Desarrolla la autoestima.

 Hay muchos estudios que indican que los niños que pasan tiempo con sus padres y participan en actividades desarrollan una autoestima positiva. Cuando los niños sienten que sus padres se preocupan por ellos y se les tiene en cuenta, se sienten más positivos consigo mismos.

 Fortalece los lazos familiares.

 Los padres e hijos que participan en salidas juntos tienen un vínculo afectivo muy fuerte porque se entienden mejor. Los padres comprenden las necesidades, habilidades y fortalezas de sus hijos y actúan para apoyarlos. Además, la experiencia de salir en familia crea elementos de comprensión y empatía no solo por la naturaleza sino también por los demás, haciendo más productivos los vínculos. La experiencia de la salida familiar fomenta la salud de las relaciones y genera satisfacción, sentimiento de pertenencia y alegría.

 Crea recuerdos felices.

  El tiempo en familia produce bonitos recuerdos para padres e hijos por igual. Los niños con recuerdos familiares felices tienen más probabilidades de generar un entorno de amor para sus propios hijos cuando crezcan. Aprender a trabajar y jugar como una unidad familiar es una de las mejores lecciones que se les puede enseñar a los niños para cuando se conviertan en adultos y padres. 

 Mejora la comunicación.

 Las salidas familiares mejoran en gran medida el nivel de comunicación dentro de una unidad familiar. Los niños, adolescentes y sus padres pueden socializar con más frecuencia, lo que actúa como un margen para sentirse cómodos unos con otros y compartir sus problemas. El efecto general de una mejor y mayor comunicación es evidente, suele haber una mayor productividad o rendimiento escolar. Además, si sabemos como comunicarnos entre nosotros, los conflictos se reducen considerablemente con nuestros seres queridos.

 Beneficios para la salud.

 Pasar tiempo en una salida familiar al aire libre ayuda a reducir los niveles de estrés y esto es fundamental para una buena salud.  Al igual que la actividad y el deporte, como es obvio, aportan múltiples beneficios en este sentido, como reducir los casos de obesidad, etc. 

 Aprendizaje

 Las salidas familiares son en sí mismas una experiencia de aprendizaje. Esto se debe a que los niños, aparte de descubrir el entorno, se descubren a sí mismos y aprenden sobre sus talentos y habilidades. Alimentar estas experiencias a través de actividades repetidas ayuda a moldear fortalezas y destrezas en campos como la música,  deportes aeróbicos o incluso el fútbol, ​​por ejemplo. Además, las salidas familiares brindan una buena plataforma para aprender nuevas habilidades y conocimientos, y se pueden complementar con otras actividades como equitación, bicicleta, esquí, cultural, entre otros.

Planificación

 Es una buena idea programar bien las salidas familiares importantes. Esto no significa que no pueda haber algo de espontaneidad en la aventura, pero algunas consultas previas y la organización de los recursos y el tiempo nos pueden ayudar a que la experiencia sea mejor. Por ejemplo, un vistazo al pronóstico del tiempo con antelación y también justo antes de salir nos puede salvar de una mala experiencia.

Mochila con las cosas esenciales.

Lo último que queremos hacer es llegar a la playa o a la ruta de senderismo y darnos cuenta de que olvidamos algo en casa. Si previamente hemos hecho una lista con las cosas que podemos necesitar y las hemos preparado, la noche anterior la colocaremos en una mochila, para tenerlo todo listo a la hora de salir.

El contenido puede variar según los hábitos de cada familia y el tipo de actividad, pero algunos elementos comunes pueden ser:

Pero cuidado, también en llevar demasiadas cosas, el secreto es optimizar al máximo el peso y el espacio, ya que una mochila demasiado pesada también es mala idea.

No hace falta llevar objetos de valor.

 El móvil si es buena idea, quizás una cámara de fotos, pero a lo mejor un ordenador portatil, iPads, joyas o dinero metálico en exceso, no tanto. Tened en cuenta que aparte del peso añadido, existe un riesgo innecesario, tanto de robo, como de perdida o rotura.

Calzado apropiado

Unos pies doloridos arruinan rápidamente el mejor de los días. Los zapatos siempre tienen que ser adecuados a la actividad. Para el campo indispensable, botas de montaña y las chanclas pueden ser perfectas para un día en la playa. (siempre y cuando no andéis largas distancias).  Si se trata de un sendero largo, también hay que prestar atención a los calcetines, que sean cómodos y transpirables, para que no salgan las temidas ampollas.

Un error de novatos es estrenar el calzado el día de la excursión, esto puede causar molestias y rozaduras, además de no conseguir la tracción adecuada y riesgo de resbalar. El calzado hay que «domarlo» como se dice vulgarmente.

Protección solar

 No importa la fecha del año, si vamos a estar al aire libre todo el día, el protector solar es fundamental. Hay que cumplir las instrucciones de uso que vengan en el recipiente. 

Poner en común un plan de acción en caso de accidente o de que alguien se pierda.

 Todo depende de la edad y nivel de madurez de los niños, el margen de libertad debe de estar adaptado y todos los miembros de la familia tienen que saber que hacer en caso de emergencia o de que alguien se separe del grupo.  

Agua

 Otra obviedad, pero que es importante recalcar, hay que tener provisiones y beber suficiente agua.  

Cumplir las normas.

 Las reglas existen por algo, en muchos casos para nuestra propia seguridad. Hay que trasladarle a los niños las normas del lugar que visitamos para que lo tengan claro antes de empezar.  

 Desembocadura del Guadalhorce.

  El Paraje Natural de la Desembocadura del Guadalhorce, está muy cerca de málaga, prácticamente a 7 kilómetros del centro, ocupa el espacio entre la zona del estadio Martín Carpena y la urbanización de Guadalmar.

 El estuario está formado por los brazos del río Guadalhorce con agua corriente y por un complejo lagunar artificial de aguas estancadas. Por su proximidad al estrecho de Gibraltar, es un lugar de paso y descanso para aves migratorias costeras y por tanto ideal para la observación de estas, las familias aficionadas a la ornitología van a disfrutar.

 Este espacio tiene 2 senderos muy bien definidos, ambos con un recorrido muy interesante y de baja dificultad, además tiene hitos curiosos como una pasarela peatonal de madera que es la más grande de Europa.

Además de los valores ambientales, en la Desembocadura del Guadalhorce hay un acceso directo a una de las pocas playas de Málaga que conserva su estado natural. Así como a los restos arqueológicos del yacimiento fenicio Cerro del Villar, actualmente en excavación.

  Montes de Málaga.

Es un Parque Natural que está súper cerca de Málaga, prácticamente pegado al casco urbano, esto permite que en pocos minutos nos podamos sumergir en plena naturaleza, disfrutar de su flora, su fauna y las todas las actividades que se nos ofrecen. (Talleres de cestería, micología, senderismo o cicloturismo asociados a la gastronomía, visitas nocturnas, rutas interpretativas, observación de orquídeas o jornadas de avistamiento y anillamiento de aves,)

 En nuestra opinión, lo mejor de este parque natural son las vistas, desde sus miradores vamos a tener unas panorámicas increíbles de la capital y de otras sierras de la provincia. En cuanto a equipamiento de uso público, cuenta con 2 áreas recreativas, «El Lagar de torrijos« y «El Cerrado» que dependiendo de la fecha suelen tener bastante gente por su proximidad a la ciudad. Se llega muy fácil con el coche y están bien equipadas ambas.

 Para las familias más andarinas hay muchos senderos de distintos niveles, y tambien rutas para bicicletas una de ellas es muy interesante para hacer en familia, ya que es circular y de nivel fácil. Se trata de la ruta que parte del Club Hípico El pinar, las vistas son inigualables y la longitud total aproximadamente de 10 Km