Muchos ya sabéis que solo hacemos sesión Newborn a bebés de hasta 15 días de vida, y claro, os preguntaréis… ¿Por qué tan poquitos días de margen?, ¿qué tienen de especial los recién nacidos durante estos primeros días? ¿Este tipo de sesiones son seguras para ellos? Etc. 

Es lógico que os surjan estas preguntas, por eso queremos hablar hoy, sobre todas esas características únicas que tienen los recién nacidos y los cuidados adecuados para ellos. 

Para ilustrar la entrada os vamos a mostrar fotitos de la sesión de Mateo que vino por nuestro estudio con tan solo 10 días y que tiene un hermoso recuerdo de esos días tan especiales y tan efímeros.

 ¿Qué aspecto tiene un recién nacido?

  En general, una de las cosas que más llama la atención, es lo cabezones que son, y lo decimos literalmente, ya que el tamaño de la cabeza con respecto al cuerpo es de aproximadamente una cuarta parte.

Otra particularidad de sus cabezas es la fontanela, su cráneo está formado por varios huesos independientes y se puede notar a simple vista, incluso cuando se irrita o llora puede que la veamos moverse, a veces si nos fijamos bien, podemos incluso notar el ritmo del pulso, todo es normal y poco a poco esos huesos se irán fusionando a lo largo de su etapa de bebé.

 En conjunto son muy compactos, el cuello a veces ni se les ve y el resto del cuerpo es tan redondeado que parecen pequeños bollitos. La barrigota gordita y el ombligo que unas veces nos llega completamente curado y otras con la pinza a puntito de caerse. 

En el siguiente enlace podéis encontrar información sobre cuidados del ombligo.

Cuidados del cordón umbilical en el recién nacido [Palabra de enfermera]

Y luego, ¿como no?… esas caritas… El rasgo más enternecedor de los recién nacidos es su carita, son tan preciosos con sus mejillas redondas y las naricitas chatas, que dan ganas de comérselos, otra característica son los labios gorditos o que tengan el callo de succión, un endurecimiento del labio que es totalmente normal las primeras semanas.

 Los brazos y las piernas los suelen traer muy flexionados y contra el cuerpo, es su postura favorita y nosotros lo sabemos, por eso todas nuestras poses se basan en la postura fetal.

 Otra cosa son las manos, suelen estar tan firmemente cerradas que cuando se hace difícil abrírselas desistimos y buscamos otra composición, ellos mandan, y… hay que tener en cuenta que su reflejo de presión puede ser realmente fuerte. 

Los pies y las manos también son grandotas en proporción y tienen unas uñas muy, muy finas y como crecen tan rápido es habitual que los bebés se rasguñen la piel, sobre todo en el pechito o los mofletes, hay que decir que estos arañacitos sé curan superrápido y que si tiene alguno en el momento de la sesión, luego se lo quitamos en la edición.

 El aspecto de la piel varía mucho debido a que todavía no tienen maduro el sistema circulatorio y pueden aparecer color azulado en las extremidades u otros tipos de coloraciones como las manchas reticuladas o el millium facial. De hecho, cuando se enfadan o lloran es posible que de manera temporal se pongan completamente rojos o moraditos.

También hay una serie de marcas que aunque tengan nombres bastante feos suelen aparecer y desaparecer en estas semanas, habitualmente sin mayor transcendencia, os dejamos enlace por si queréis ampliar: 

Marcas en la piel del recién nacido [guiainfantil.com]

Marcas en la piel del bebé [consumer.es]

 Curiosísimo también es él -lanugo-, un pelito fino que parece la piel de un melocotón y que traen algunos bebés en el rostro, los hombros o la espalda, hay que decir que es temporal, en unas pocas semanas se les habrá caído. Al igual que es normal también que la capa superior de la piel se escame y se caiga durante la primera o segunda semana o incluso nada más nacer

 ¿Cómo es el comportamiento de un recién nacido?

  Durante las primeras semanas, los bebés suelen pasar la mayor parte del tiempo durmiendo y durante la sesión para la mayoría de las poses es necesario que estén dormidos, por lo que nos viene de perlas, además no hay imagen que dé más ternura y paz, que un bebé en pleno sueño profundo.

 En cuanto a sonidos, la variedad que son capaces de hacer es sorprendente, aunque cada uno tiene su propio repertorio de soniditos, lo más habitual son los chillidos agudos o el llanto fuerte cuando reclaman por alguna necesidad.

Los estornudos y el hipo también son comunes y no suelen ser señales de ningún problema adicional, durante la sesión, si se produce hipo, descansaremos un poco hasta que se le pase y seguimos.

 Durante las primeras semanas, gran parte del tiempo, el bebé suele tener los puños cerrados, los hombros curvados, la cadera y las rodillas flexionadas, y los brazos y las piernas cerca del cuerpo. Esta posición es similar a la posición fetal durante los últimos meses del embarazo y es la que reproducimos matizada en cada una de las poses a lo largo la sesión.

  Los bebés nacen con una serie de respuestas instintivas a los estímulos o reflejos primitivos que van desapareciendo mientras madura su sistema nervioso, nosotros durante la sesión prestamos especial atención al reflejo del Moro, un reflejo que parece un sobresalto que hace que el bebé mueva los brazos repentinamente hacia los lados y los vuelva a llevar rápidamente al centro del cuerpo. Les puede romper el estado de tranquilidad, por eso la mayoría de las poses los mantienen recogidos y cuando los cogemos nosotros se los sujetamos con cuidado para que se sienta todo el tiempo seguro y arropado.

 ¿Cómo son los primeros días con mi bebé?

Nosotros también somos padres y sabemos que los primeros días y semanas de vida de nuestros hijos pueden ser agotadores, además, cuando somos primerizos estamos tan llenos de temores e inseguridades que se nos puede hacer bastante difícil. Es normal, la responsabilidad es inmensa y por mucho que se conozca la teoría, la realidad es que las vicisitudes del cuidado de un recién nacido son muy imprevisibles.

Surgen miles de dudas: en cuanto a sueño, alimentación, cuidados, etc.. Es un proceso normal, necesitáis tiempo para conocer al bebé y que él os conozca, tomároslo con calma, nuestra recomendación siempre es esa, – que os dejéis llevar por vuestro instinto,- (estamos biológicamente preparados) y aunque se nos haga cuesta arriba, tenemos que confiar en nosotros y disfrutar de todas las pequeñas maravillas que os regalará cada día vuestro retoño.

Si en algún momento os sentís ansiosos o inseguros por alguna parte del cuidado de vuestro bebé, no dudéis nunca en llamar a vuestro pediatra o buscar apoyo en familiares y amigos

Os dejamos el resto de la sesión de Mateo, muchas gracias por leernos.